Descripción
Re-lectrolites de SuraVitasan contiene minerales esenciales como sodio, potasio, magnesio y calcio; así como vitaminas C y B6. En particular, el sodio, el potasio y el magnesio son importantes porque se pierden a través de la transpiración durante el ejercicio o se tiene unas mayores necesidades durante el mismo.
El agua contribuye del 50 al 70% de la masa corporal total y está compartimentada dentro de los espacios intracelulares (65%) y extracelulares (35%) (1). Durante el ejercicio, la pérdida del 2% o más de la masa corporal en forma de agua se considera deshidratación, y compensar esto es el objetivo de la hidratación deportiva y el reemplazo de electrolitos. Los electrolitos como el sodio, el potasio y el magnesio regulan la contracción y relajación de los músculos, y también juegan un papel en el equilibrio de líquidos entre los compartimentos del cuerpo (es decir, intracelular versus extracelular) (2,3). Los síntomas de la deficiencia de electrolitos incluyen calambres musculares, debilidad, mareos, confusión, náuseas y latidos cardíacos irregulares.
La hidratación y el reemplazo de electrolitos pueden mitigar síntomas como calambres musculares, dolor de cabeza, mareos y fatiga, así como mejorar el rendimiento deportivo (4). Una buena hidratación también reduce el riesgo de enfermedades relacionadas con el calor y el esfuerzo físico (1). Beber de forma planificada es más eficaz para prevenir la deshidratación en comparación con la hidratación ad libidum (beber por sed), especialmente en determinadas situaciones. Esto incluye, “actividades de una duración mayor a 90 minutos, particularmente con calor; ejercicio de alta intensidad con mucha sudoración; ejercicio donde el rendimiento es una preocupación; y cuando se desea una ingesta de carbohidratos de 1 g/min” (4).
Los ensayos clínicos han demostrado que la hidratación junto con electrolitos puede reducir el umbral de calambres musculares, dolor y mejorar el rendimiento. En un estudio, se evaluó la susceptibilidad a los calambres de 9 participantes bien hidratados y propensos a los calambres musculares midiendo la frecuencia del umbral de estimulación nerviosa a la que se producen los calambres antes y después del consumo de una bebida que contiene electrolitos y carbohidratos (5). La bebida contenía 120 kcal como carbohidratos, 840 mg de sodio, 320 mg de potasio y 5 mg de magnesio. Los resultados mostraron que la bebida con electrolitos aumenta el umbral de calambres y reduce el dolor en comparación con una bebida de placebo.
Otro estudio evaluó el efecto de administrar una solución de carbohidratos y electrolitos a jugadores de hockey durante el ejercicio sobre hielo que simula un juego. Un total de siete jugadores realizaron ejercicios de hockey mientras consumían la bebida, en comparación con el rendimiento mientras se deshidrataban progresivamente (6). También se realizaron biopsias musculares. Los resultados mostraron que, en comparación con la deshidratación (pérdida de 1,8% de masa corporal), la ingestión de la solución de carbohidratos y electrolitos mejoró el rendimiento voluntario y el uso de glucógeno, y redujo el esfuerzo percibido en el tercer período del juego simulado. La temperatura central media también se redujo por la ingestión de la solución de carbohidratos y electrolitos. Esto muestra que mejoró el rendimiento del ejercicio al tiempo que redujo el esfuerzo percibido.
Otro estudio en jugadores de hockey encontró efectos similares, mejor rendimiento y reducción de la fatiga asociada con la ingestión de una solución de carbohidratos y electrolitos (7). En este estudio, los investigadores observaron que cuando se hidrataron con carbohidratos y electrolitos, los jugadores de hockey mostraron un aumento en la velocidad media de patinaje y en el tiempo de alto esfuerzo entre 30 y 50 minutos del juego. También cometieron menos pérdidas de disco y completaron un mayor porcentaje de pases en los últimos 20 minutos de juego en comparación con los jugadores que no recibieron líquido. El rendimiento en el patinaje al sprint post partido mejoró en el grupo de la solución de carbohidratos y electrolitos, también la fatiga fue menor después de la prueba.
Otro estudio se realizó en mujeres activas que realizaban como ejercicio correr. En este estudio, un total de ocho mujeres sanas se ofrecieron como voluntarias para realizar una sesión de correr hasta el agotamiento al 70% de su consumo máximo de oxígeno en una cinta de correr (8). Durante cada carrera, los sujetos recibieron una solución de carbohidratos y electrolitos al 6% o una bebida placebo cada 20 minutos durante el ejercicio, en un diseño cruzado, doble ciego y aleatorizado. Los resultados mostraron que el tiempo hasta el agotamiento fue un 16% más largo durante la prueba (106,2 min) en comparación con el grupo placebo (91,6 minutos) (p <0,05). No hubo diferencias significativas en el nivel de lactato plasmático, la tasa de intercambio respiratorio, la frecuencia cardíaca, la tasa de esfuerzo percibida, la sensación de sed o el malestar abdominal.
El ácido málico es un componente esencial del Ciclo de Krebs, donde se produce la conversión de energía a partir de los nutrientes (carbohidratos, proteínas, grasas y agua), y que generará energía para las actividades aeróbicas y anaeróbicas. Si no existe un adecuado nivel de ácido málico, este proceso metabólico no puede ser ejecutado con total normalidad, pudiendo ocasionar un escenario de fatiga. El ácido málico se utiliza para tratar a las personas con síndrome de fatiga crónica y la fibromialgia, que provoca un intenso dolor en los músculos y los tendones (9-10).
El ácido cítrico es un actor clave en el ciclo del ácido tricarboxílico, que es parte de una vía metabólica involucrada en la conversión química de carbohidratos, grasas y proteínas en dióxido de carbono y agua para generar energía. El ácido cítrico reduce el estrés fisiológico y reduce la fatiga física (11).
