Descripción
El aceite de Tamanu es conocido como “el aceite sagrado” debido a que los árboles que producen las nueces de Tamanu se plantaban en los «marae», antiguos lugares sagrados de culto.
El aceite de Tamanu se caracteriza por su contenido en derivados cumarínicos además de su contenido en ác. grasos esenciales, vitamina E y xantonas.
Es el último remedio de rescate para los cuidados de la piel. El aceite de semilla de tamanu es antiinflamatorio, antimicrobiano, antibiótico, antioxidante y antienvejecimiento. Acelera la curación y la cicatrización de cortes, llagas, quemaduras, forúnculos, acné, eczema, psoriasis, y mucho más.
El árbol del tamanu (Calophyllum inophyllum) es originario de las regiones tropicales del sudeste asiático, donde crece silvestre tanto en la costa como en el interior. El aceite de tamanu se produce a partir del núcleo contenido dentro de la nuez de la fruta del tamanu. Con el fin de liberar su aceite, el núcleo debe dejarse secar al sol durante 1-2 meses, tras los que se cubrirá con un aceite oscuro, y muy pegajoso. A partir de ese punto, el núcleo se prensa en frío para extraer el verdoso y fragante aceite de tamanu. Si se mira de cerca, el aceite de tamanu exhibe unos brillantes microcristales delicados.
Los pueblos indígenas del sudeste asiático han utilizado este «aceite sagrado» durante siglos. Se consideraba sagrado debido a que los árboles de tamanu se plantaban en los «marae», antiguos lugares sagrados de culto en Tahiti. Los antiguos habitantes veneraban estos lugares y presentaban ofrendas de aceite de tamanu de forma habitual a los dioses.
El aceite de tamanu está compuesto por un 92% de lípidos neutros, 6.5% de glicolípidos y un 1.5% de fosfolípidos. Además, contiene xantonas, aceites esenciales y vitamina E(2).
Específicamente, el aceite de tamanu posee una capacidad única de promover la formación de nuevo tejido, acelerando la curación de heridas y el crecimiento de piel sana. Por esta razón, es ampliamente usado para curar cicatrices de acné, estrías e incluso quemaduras graves y atenuar marcas y manchas(1,3).
La vitamina E tiene la capacidad de neutralizar los radicales libres solubles en grasa y ayudar a proteger las membranas celulares de la oxidación de lípidos, mantener la elasticidad y firmeza de la piel(3).
Tiene un efecto analgésico y alivia el dolor de articulaciones y muscular como en esquinces, ciática, artritis y reumatismo. El aceite de tamanu se puede aplicar incluso en cuello para aliviar y calmar el dolor de garganta(5).
También se ha demostrado que tiene una actividad antiinflamatoria debida a las xantonas, que explica la reducción inflamatoria que acompaña generalmente todo tipo de lesiones cutáneas: heridas, erupciones cutáneas, picaduras de insecto y granos de acné. Además presenta una potente acción antibacteriana y antifúngica, debido al alto contenido de fosfolípidos y glicolípidos, eficaz para la compensación y curación de agentes patógenos como abscesos y heridas en cabello, piel y uñas(3,5,6).