Quercitin 98 – 90 cápsulas

Descripción

Se trata de un bioflavonoide bien conocido por sus beneficios terapéuticos para la salud. De entre todos los flavonoides (o también llamados bioflavonoides), la quercitina es uno de los más estudiados y es el más abundante en una gran variedad de alimentos de consumo habitual como son las manzanas, la cebolla, el té, las bayas, los vegetales y los frutos secos.

QUERCITINA: muestra una actividad antihistamínica, antialérgica y antiinflamatoria importante. No sólo inhibe la liberación de histamina, sino que también su formación y la de otros compuestos mediadores de la inflamación y alergénicos como las prostaglandinas y los leucotrienos. Y resulta, por tanto, de gran ayuda en casos de asma e infecciones del tracto respiratorio dado el proceso constrictor de los bronquios que estos procesos llevan asociados ^(1-6).

Las reacciones alérgicas provocan una liberación de histamina y leucotrienos, compuestos mediadores de los síntomas de alergia y de la inflamación. La presencia de histaminas incrementa la permeabilidad vascular favoreciendo la acumulación de inmunocomplejos que provocan daños en los tejidos como, por ejemplo, de las vías respiratorias. Los niveles altos de histaminas están relacionados con un sistema inmunitario debilitado y por lo tanto más vulnerable a las reacciones alérgicas.

La quercitina actúa también como potente antioxidante protegiendo las células del estrés oxidativo provocado por los radicales libres e inhibe la destrucción de tejido asociada a una lesión ⁽⁷⁾.

Junto con su efecto antiinflamatorio, su propiedad inhibidora de la oxidación del colesterol LDL explica sus beneficios cardiovasculares. Potencia además el efecto antioxidante de la Vitamina C y por sí misma o conjuntamente con ella ayuda a reducir la incidencia del daño oxidativo en la estructura neurovascular de la piel e inhibe el daño causado en las neuronas ^(8-11).

Según estudios preliminares en laboratorio, la quercitina ayuda a reducir la formación de estrógenos, los cuales favorecen el crecimiento de células cancerosas. Su acción antitumoral reside también en su efecto antioxidante de utilidad para superar la resistencia a la quimioterapia al promover la apoptosis de las células cancerosas, así como en su efecto de bloquear las proteínas de golpe de calor y de bloquear el sistema desarrollado por estas células para expulsar de las mismas los agentes quimioterapéuticos ^(12-14).